En el entorno del singular roble del arco una rareza botánica de gran belleza, la Iberis umbellata, todo un placer para los sentidos
jueves, 24 de junio de 2010
IBERIS UMBELLATA
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sábado, 5 de junio de 2010
PLANTAS DE RIO PLANTAS DE MONTAÑA
la humedad edáfica de las riberas del río Guadalquivir y del arroyo del Molinillo nos permite disfrutar de las plantas por un lado especializadas en soportar las riadas, aluviones y desecaciones de un río con claro estiaje como el Guadalquivir y por otro lado de las plantas megaforbias propias de zonas permanentemente húmedas de los arroyos encajados en las montañas.
Uno de esos megaforbios es el Delphinium pentagynum en un regazo del arroyo del Molinillo
Las leguninosas reptantes son abundantísimas, más escasa se hace la oreja de liebre (Scorpiurus muricatus) que está adaptada a suelos más compactados y soleados
Entre las monocotiledoneas las riberas acumulan una gran diversidad en la primera banda, en las posiciones más próximas al agua donde la enea, el junco, la espadaña...etc comparten refugio con el mas ancestral Sparganium erectum
Las monocotiledoneas mas exhuberantes del monte son, sin embargo, las orquideas, aunque igualmente los espartos (Stipa sp), el lastón (Brachypodium sp), o incluso otras monocotiledoneas menos conocidas como la zarzaparrilla (Smilax aspera), el rusco (Ruscus aculeatus) o la esparraguera (asparagus sp) pueden alcanzar una grna vistosidad
La orquidea Orchis langei crece en las cercanias del roble de la Fuente del Arco, cuya descendencia como vemos acusa la herencia de Quercus robur extremadurensis en numerosos brinzales
Uno de esos megaforbios es el Delphinium pentagynum en un regazo del arroyo del Molinillo
En ambientes parecidos del Guadalquivir las ranunculaceas no hacen acto de presencia pues no soportan las cambios drasticos de la humedad edáfica, podemos encontrar sin embargo, escrofulariaceas como la verónica.
Mientras, en la montaña, la familia de las escrofulariaceas está bien representada por el jopo (Orobanche sp) o por la escrofularia (Scrophularia nodosa)
En los rios se acrecenta el número de especies de labiadas como la mentha, el poleo, el mastranzo o el lycopus europaeus
Las leguninosas reptantes son abundantísimas, más escasa se hace la oreja de liebre (Scorpiurus muricatus) que está adaptada a suelos más compactados y soleados
Entre las monocotiledoneas las riberas acumulan una gran diversidad en la primera banda, en las posiciones más próximas al agua donde la enea, el junco, la espadaña...etc comparten refugio con el mas ancestral Sparganium erectum
Las monocotiledoneas mas exhuberantes del monte son, sin embargo, las orquideas, aunque igualmente los espartos (Stipa sp), el lastón (Brachypodium sp), o incluso otras monocotiledoneas menos conocidas como la zarzaparrilla (Smilax aspera), el rusco (Ruscus aculeatus) o la esparraguera (asparagus sp) pueden alcanzar una grna vistosidad
La orquidea Orchis langei crece en las cercanias del roble de la Fuente del Arco, cuya descendencia como vemos acusa la herencia de Quercus robur extremadurensis en numerosos brinzales
domingo, 25 de abril de 2010
MAS FOTOS MALAS ABEJARUCO, TREPADOR, SERAPIAS Y ARMERIA
lunes, 8 de marzo de 2010
HYPERICUM DUDOSO
Este hipérico me trae por la calle de la amargura, parece undulatum pero el contorno de las hojas no es "undulatum" ¿podría ser tetrapterum?, parece que tiene tomento, pero no se parece en nada a tomentosum ni a elodes. Espero que, a pesar de lo cutre de la foto, alguien sea capaz de sacarme de dudas, que me consta que esto lo leen grandes botánicos.
viernes, 5 de marzo de 2010
SUBIDA A LA FUENTE DEL ARCO
Se me ocurrió ayer como quien no quiere la cosa subir de nuevo a la sierra andando, totalmente desprovisto de vehículo, en total 2 horas y media de caminata para ir y lo mismo para volver (aunque se agradece la continua cuesta abajo a la vuelta). Por el camino se observaron golondrinas, carboneros, arrendajos, y toda suerte de cantos de pájaros que en los castañares abrumaban por su variedad y también por que no decirlo agresividad ante los extraños. El camino era se puede decir caudaloso, el agua tenía poco con las impresionantes chorreras y bullía tambien camino abajo por entre las pedrizas dejando escaso margen al caminante
Una vez arriba el paisaje invernal se mostraba en toda su belleza
Castañares, quejigares, alcornocales, los 10 kilometros de camino ascendente sobre pedregales inmisericordes de la cuesta del
reventon habían merecido la pena, desde aqui un llamamiento
a que se arregle la cuesta al menos en un ancho que permida
poder recorrerla sin tener que recurrir despues al traumatologo
Los caducifolios ofrecen a estas alturas su imagen mas fantasmagórica, desprovistos por completo de hojas y alzándose entre la neblina
La humedad nos regala en marzo la posibilidad de observar hongos, si bien perdimos la ocasión de ver setas en un otoño tan seco, los hongos oportunistas saprófitos e incluso epífitos nos sugieren formas caprichosas. Crecen por doquier los hongos filiformes que se alojan en las pequeñas ocquedades de los árboles recreando un paisaje karstico con multitud de estalactitas, es la Clavulina cinerea
En los árboles los hongos epífitos se agarran a las ramas, en este caso la tremela (Tremella mesenterica), un hongo gelatinoso, que evidencia pudrición, ofrece formas caprichosas y una coloración fascinante cuando borta de las ramas de los árboles donde unicamente puede sobrevivir mientras la humedad se mantiene muy alta
Para finalizar el roble de la Fuente del Arco espera generoso al visitante y aún en el rigor del invierno nos regala sus hojas secas que con sus formas totalmente inusuales en estos campos sureños dan testimonio de una córdoba más húmeda y sobre todo de un clima más regular y no como el que ahora sufrimos donde las sequías de mas de 6 meses se alternan con riadas, inundaciones y crecidas de ríos como nunca se han visto
Una vez arriba el paisaje invernal se mostraba en toda su belleza
Castañares, quejigares, alcornocales, los 10 kilometros de camino ascendente sobre pedregales inmisericordes de la cuesta del
reventon habían merecido la pena, desde aqui un llamamiento
a que se arregle la cuesta al menos en un ancho que permida
poder recorrerla sin tener que recurrir despues al traumatologo
Los caducifolios ofrecen a estas alturas su imagen mas fantasmagórica, desprovistos por completo de hojas y alzándose entre la neblina
La humedad nos regala en marzo la posibilidad de observar hongos, si bien perdimos la ocasión de ver setas en un otoño tan seco, los hongos oportunistas saprófitos e incluso epífitos nos sugieren formas caprichosas. Crecen por doquier los hongos filiformes que se alojan en las pequeñas ocquedades de los árboles recreando un paisaje karstico con multitud de estalactitas, es la Clavulina cinerea
En los árboles los hongos epífitos se agarran a las ramas, en este caso la tremela (Tremella mesenterica), un hongo gelatinoso, que evidencia pudrición, ofrece formas caprichosas y una coloración fascinante cuando borta de las ramas de los árboles donde unicamente puede sobrevivir mientras la humedad se mantiene muy alta
Para finalizar el roble de la Fuente del Arco espera generoso al visitante y aún en el rigor del invierno nos regala sus hojas secas que con sus formas totalmente inusuales en estos campos sureños dan testimonio de una córdoba más húmeda y sobre todo de un clima más regular y no como el que ahora sufrimos donde las sequías de mas de 6 meses se alternan con riadas, inundaciones y crecidas de ríos como nunca se han visto
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martes, 23 de febrero de 2010
POR LOS PELOS - TRICOMAS FOLIARES DE Q. VIVERII
El estudio de los tricomas foliares de nuestros árboles se convierte en la solución científicamente más aceptada a la hora de realizar una clasificación taxonómica fiable del género quercus, en el cual la morfología foliar a menudo puede llamar a engaño.
El tricoma foliar es el indumento o pilosidad que encontramos en el envés y a menudo también en el haz de las hojas de numerosos árboles destacando las quercíneas y las salicáceas, aunque los encontramos abundantes en algunos arbustos como el avellano, los serbales, el cornejo y el cotoneaster y en hojas juveniles de casi todas las especies (castaño, fresno, haya...) cayendo pronto o permaneciendo de manera muy escasa.
Su función depende de la especie, en algunas mejora el intercambio gaseoso, en otras funciona como pantalla que refleja los rayos solares, en otras sirve para retener la humedad en estaciones secas, en otras forma estrías en la superficie foliar que aumentan su capacidad de fotosíntesis
La presencia de tricomas foliares es independiente de la idea de género y se establece más a nivel de especie, esto es, especies de un mismo género pueden tener o no tener tricomas foliares (p ej encina de hojas muy pubescentes y coscoja de hojas muy glabras)
La hoja sin tricomas foliares o con tricomas escasos se denomina glabra o en su caso parcialmente glabra
El estudio del indumento foliar del roble pedunculado de la Fuente del Arco sitúa a dicho arbol como un híbrido resultado de una mezcla en la que participa:
- entre un 35 y un 50 % de Quercus canariensis
- entre un 20 y un 30 % de Quercus faginea ssp broteroi
- entre un 25 y un 35% de Quercus robur ssp pedunculata
En la imagen se ilustra el estudio de los tricomas foliares del roble de la Fuente del Arco realizado por el profesor Alexis Rossell
lunes, 1 de febrero de 2010
AÑO INTERNACIONAL DE LA BIODIVERSIDAD
Este año es el año internacional de la biodiversidad, declarado así por la asamblea general de las Naciones Unidas. Este término no solo hace referencia a la diversidad de especies, si no también al tamaño de sus poblaciones, la variedad de ecosistemas y diferencias genéticas entre los individuos.
La actual situación de perdida continuada de especies y poblaciones resulta alarmante e insostenible, cuando más del 70 % de las especies de plantas conocidas están amenazadas y alrededor del 30-40% de los animales superiores conocidos también lo están.
El estado de la biodiversidad en un ecosistema es el mejor indicador ambiental que podemos encontrar, indica, en caso de compararlo con un estado anterior de mayor riqueza, una degradación del medio, pues el estado de mayor evolución de cualquier ecosistema, lo que se viene a denominar "estado climax" es siempre el de mayor complejidad y diversidad de cuantos son posibles en un determinado lugar.
Por lo tanto el estado óptimo del medio ambiente que nos rodea es siempre el de máxima biodiversidad posible y el de mayor complejidad de las estructuras del ecosistema que sostiene
Una interpretacion economicista del medio ambiente lleva igualmente a la biodiversidad al primer plano, teniendo ésta un valor cuantificable y medible por la ciencia de la economía como primer recurso de la vida diaria en una economía que se basa en la explotación sistemática de los recursos de la naturaleza, los cuales tienen un origen, en gran parte biológico (madera, carbón, petroleo. alimentos, medicinas...etc) por lo que se ha decidido llamarlos "recursos biológicos".
En la actualidad explotamos los recursos biológicos del planeta heredados de épocas pasadas además de consumir íntegramente los que la naturaleza produce cada año, lo cual nos hace vivir más allá de nuestras posibilidades y comprometer asi la sostenibilidad ambiental del planeta en un futuro inmediato.
viernes, 8 de enero de 2010
ROBLE PEDUNCULADO EN CORDOBA II
¿Creíais que ya me habia olvidado del roble de la Fuente del Arco? pues no!!!! he aquí la hoja más parecida a quercus robur que le he podido sacar a despecho de los temporales, disfrutadla que cualquier día nos lo talan, total para todo el mundo no es más que un quejigo de los muchos que hay
ALISEDAS DEL GUADALQUIVIR
Habrá que indagar más sobre el aliso (Alnus glutinosa) en el valle del Guadalquivir, por lo pronto certifico su presencia en el Bejarano, más testimonial que otra cosa, no conforma una aliseda propiamente dicha puesto que el tramo que visité parece haber sido arrasado y puesto en cultivo para castaño. Hasta ahora y por lo recóndito de su ubicación pensaba que era una leyenda forestal pero ya queda claro que sí, que el aliso es otro árbol más de nuestros bosques, especialmente castigado eso sí, por sus requerimientos ambientales de aguas estables y puras y por su poco o nulo aprovechamiento, madera muy buena (impermeable) pero con poca productividad y sin fruto comercializable.
Ignoro si habrá más en otros tramos, ignoro si el aliso llega al mismo río Guadalquivir como se dice en cordobapedia del tramo del Guadalquivir a su paso por Almodovar del Rio, se
sabe que es abundantisimo en los arroyos cercanos de la sierra de Hornachuelos destacando la aliseda del Guadalora con tramos kilométricos y alturas de fustes de más de 15 metros.
Sería interesante realizar un inventario de la situación de este árbol en los alrededores del Guadalquivir a su paso por Córdob
a, ahora que parece que proteger las arboledas de ribera está de moda (siempre y cuando se deje a la agencia andaluza del agua arrasar con el resto que no está protegido)
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